Viernes 06 de Abril 2050.
01: 05 a.m.
Aurora online
...Su cuerpo se sentía superior, su agilidad y rapidez eran sobre humanos, pero su sed de venganza era mayor! No podía creer cómo su cuerpo reaccionaba ante sus nuevas habilidades físicas, sus saltos de azotea en azotea eran cada vez mayores, aun contra estructuras de vidrio su armadura no fallaba. Pasó por sobre el parque Hachiko y sintió como su armadura vibraba al aullar los kodomotachi no hoshi, ellos lo podían ver –“si tan solo pudiera pasar más desapercibido”, pensó, y en cosa de segundos, su armadura comenzó a resonar y de pronto desapareció. Los kodomotachi aplaudían y vitoreaban su desaparición! Tsugoi, Onii-chan!!
La armadura era maravillosa, en solo 30 minutos había recorrido una gran distancia, además, el dispositivo furtivo le permitió entrar fácilmente en la torre Toyotomi. Ningún solo guardia pudo verlo o escucharlo. En su mente solo estaba la idea de saldar cuentas con el Jefe de seguridad y protocolos, Rintaro Asegawa.
“Asegawa!” no escaparás de mí, dijo mientras se re-materializaba. Con una velocidad increíble se abalanzó sobre el nipón. Para su sorpresa, Rintaro lo esquivó sin mayor dificultad, luego se trenzaron en un intercambio de golpes que más bien parecía una coreografía a alta velocidad. Golpe tras golpe, ambos rivales se median, ambos rivales sonreían pues sus destinos se habían cruzado en forma permanente.
“Ashton-dono! Es un placer ver cómo ha evolucionado gracias a este pequeño renacer que hicimos para usted.”
“¿Evolucionado?! Me has transformado en un monstruo!!
¡He dejado de existir!!”, furioso respondió Derek Ashton mientras golpeaba con mas fuerza a Rintaro Asegawa, quien tranquilamente bloqueaba sus golpes. De una patada este puso distancia contra su agresor, y luego de darle una mirada de frustración mientras limpiaba un poco de sangre que brotaba de su labio, acotó: “lamento ver que eres un malagradecido Ashton-san, en realidad es muy frustrante, pero a la vez te estamos muy agradecidos por tu participación en nuestro pequeño experimento. Bueno, ya probamos tus habilidades físicas ahora es tiempo de probar otras muy diferentes.
-“¿Otras habilidades? ¿A que te refieres Asegawa?”, desafiante preguntó Derek Ashton. Rintaro sonrió y haciendo un ademán con su mano le dijo: “¡ve y cumple tu destino “Kage” porque eso es lo que eres, una sombra!! Vuelve a Nueva Regina, pequeño hermano.” Al bajar su mano, Derek Ashton sintió igual a un millón de agujas contra su cuerpo y, por causa del dolor, cerró sus ojos. Al abrirlos se encontraba en Nueva Regina.
Al saber que estaba de vuelta en su ciudad, un nombre se vino a su mente, Esmeralda. “Esmeralda, debo ver a esmeralda!”
Y así volvemos al principio, Esmeralda falleció, el Unicorn Plaza Hotel estaba clausurado, lo único que encontró de su pasado fue a Mauro Jael y como era de esperarse le costó a este reconocerle.
-“¿Derek, Derek Ashton? ¿Eres tú? Después de eso hubo un silencio en la habitación, se podía escuchar a lo lejos una sirena de bomberos, el extraño personaje siguió caminando y dijo: Derek Ashton está muerto, al igual que sus recuerdos” y desapareció.
Solo la fría brisa de Abril y la luz de luna lo abrazaban, confortándolo en su dolor, en su pérdida. Asegawa lo llamo “Kage” (sombra) y no podía haber sido más adecuado, pues ya no era Derek, era solo una débil sombra de lo que fue, por eso ahora se hace llamar “Shade” (matiz).
domingo, 6 de mayo de 2007
Shade 2da parte
Viernes 6 de Febrero 2050.
01:06 a.m.Aurora online
Al llegar a Japón, fuimos recibidos por ese extraño tipo, Rintaro Asegawa. La primera vez que lo vi, me dio mala espina, no es el típico japonés que uno se imagina. La primera característica que sobresale de su persona es ser albino, luego su estatura casi dos metros de alto. Al estrechar manos con él medimos nuestras fuerzas por un segundo, fue impresionante, tiene una presencia que te opaca, te hace sentir como un debilucho. “Ashton-dono, es un placer conocer a mi igual en el ámbito de seguridad y protocolo” fueron sus palabras que mas bien sonaban como el siseo de una serpiente. –“el placer es mío, Asegawa-san, el placer es mío”
Por favor, acompáñenme caballeros, Toyotomi-sama los espera en la recepción. “debes tener cuidado con este tipo Derek, se nota que sabe lo que hace”, fue el comentario de Mortgarth. “lo sé, repliqué, sería un hueso muy duro de roer si tuviera que enfrentarlo…”
Y no me equivoqué, nunca lo hago al evaluar a un adversario, sus golpes tan fuertes, tan sobrehumanos. Aun después de haber eliminado a su séquito de guardias, no tuve muchas oportunidades al enfrentarme a él. Tan rápido, tan inesperado. No pude asestarle ni un solo golpe. Al cabo de un minuto mis pulmones ya estaban respirando fuego, mis brazos y piernas pesaban una tonelada. Termine colapsando, él me miró con desdén, se acercó a mi y me levantó del suelo por el cabello para luego arrojarme contra una pared. -“Ashton-Dono, su intrusión en nuestras instalaciones es imperdonable, pero a la vez de gran ayuda. Toshiro! Hanzo! Llévenlo al tercer sub-suelo”.
Aun no comprendía por qué no había sido eliminado de inmediato, pronto lo sabría y la respuesta me acompañaría por el resto de mi vida. “Ashton- Dono, su presencia nos servirá para probar un pequeño experimento que unos asociados míos tienen, pero para ello debemos prepararlo a ud. para que nos pueda ser verdaderamente útil en la investigación. Toshiro!! Mi katana”. Blandió su espada en frente de mi rostro dos veces, -“no me asustas con tu espada, Rintaro”. El jefe de protocolo me observó consternado y luego de una mueca señaló -“intimidarlo nunca fue mi intención, Ashton-Dono, tan solo cortarlo bien”. Después de eso, lo sentí, al igual que un ardor en mi cara el filo de la katana cortando en forma descendente a lo largo del lado derecho de mi rostro, cortando mi parpado y mi mejilla. La sangre no me dejaba ver bien por mi ojo derecho y justo cuando el shock me dejaba permanecer impávido, lo sentí una vez más, ese ardor, esta vez acompañado de un intenso dolor, era mi mano izquierda, amputada desde su muñeca. El dolor era tan intenso que sentí desfallecer, pero justo antes de eso, sentí ese líquido frío y de pungente aroma, lo reconocí en un segundo. Benceno, me habían roseado con benceno.
Rintaro acercó su rostro al mió, con una sonrisa macabra, me dijo: -“olvida tu vida hasta este momento, Ashton-dono, pues desde hoy en adelante has dejado de existir”. Luego solo sentí un calor abrasador y me desmayé.
El frió me despertó, había sido arrojado en un canal en las afueras de Tokio. No reparé en mi condición hasta que recordé lo que había ocurrido. Mi primera reacción fue ver mi mano amputada, mi gran sorpresa fue ver que ahora había sido reemplazada por una mano cibernética que funcionaba como si hubiese nacido con ella, luego lo recordé! El benceno y el calor!! Dios mío! Mi cuerpo estaba cubierto con una especie de armadura, no pude sacármela. Un panel que se encontraba en mi antebrazo derecho comenzó a destellar, un texto apareció en una pequeña pantalla. “Armadura de soporte vital funcionando” ¿Qué demonios había ocurrido con Rintaro y sus hombres? ¿Cómo sobreviví? ¿Quién instaló esta armadura en mi cuerpo y por qué? Tantas preguntas y solo un nombre se venia a mi mente “Rintaro Asegawa”.
01:06 a.m.Aurora online
Al llegar a Japón, fuimos recibidos por ese extraño tipo, Rintaro Asegawa. La primera vez que lo vi, me dio mala espina, no es el típico japonés que uno se imagina. La primera característica que sobresale de su persona es ser albino, luego su estatura casi dos metros de alto. Al estrechar manos con él medimos nuestras fuerzas por un segundo, fue impresionante, tiene una presencia que te opaca, te hace sentir como un debilucho. “Ashton-dono, es un placer conocer a mi igual en el ámbito de seguridad y protocolo” fueron sus palabras que mas bien sonaban como el siseo de una serpiente. –“el placer es mío, Asegawa-san, el placer es mío”
Por favor, acompáñenme caballeros, Toyotomi-sama los espera en la recepción. “debes tener cuidado con este tipo Derek, se nota que sabe lo que hace”, fue el comentario de Mortgarth. “lo sé, repliqué, sería un hueso muy duro de roer si tuviera que enfrentarlo…”
Y no me equivoqué, nunca lo hago al evaluar a un adversario, sus golpes tan fuertes, tan sobrehumanos. Aun después de haber eliminado a su séquito de guardias, no tuve muchas oportunidades al enfrentarme a él. Tan rápido, tan inesperado. No pude asestarle ni un solo golpe. Al cabo de un minuto mis pulmones ya estaban respirando fuego, mis brazos y piernas pesaban una tonelada. Termine colapsando, él me miró con desdén, se acercó a mi y me levantó del suelo por el cabello para luego arrojarme contra una pared. -“Ashton-Dono, su intrusión en nuestras instalaciones es imperdonable, pero a la vez de gran ayuda. Toshiro! Hanzo! Llévenlo al tercer sub-suelo”.
Aun no comprendía por qué no había sido eliminado de inmediato, pronto lo sabría y la respuesta me acompañaría por el resto de mi vida. “Ashton- Dono, su presencia nos servirá para probar un pequeño experimento que unos asociados míos tienen, pero para ello debemos prepararlo a ud. para que nos pueda ser verdaderamente útil en la investigación. Toshiro!! Mi katana”. Blandió su espada en frente de mi rostro dos veces, -“no me asustas con tu espada, Rintaro”. El jefe de protocolo me observó consternado y luego de una mueca señaló -“intimidarlo nunca fue mi intención, Ashton-Dono, tan solo cortarlo bien”. Después de eso, lo sentí, al igual que un ardor en mi cara el filo de la katana cortando en forma descendente a lo largo del lado derecho de mi rostro, cortando mi parpado y mi mejilla. La sangre no me dejaba ver bien por mi ojo derecho y justo cuando el shock me dejaba permanecer impávido, lo sentí una vez más, ese ardor, esta vez acompañado de un intenso dolor, era mi mano izquierda, amputada desde su muñeca. El dolor era tan intenso que sentí desfallecer, pero justo antes de eso, sentí ese líquido frío y de pungente aroma, lo reconocí en un segundo. Benceno, me habían roseado con benceno.
Rintaro acercó su rostro al mió, con una sonrisa macabra, me dijo: -“olvida tu vida hasta este momento, Ashton-dono, pues desde hoy en adelante has dejado de existir”. Luego solo sentí un calor abrasador y me desmayé.
El frió me despertó, había sido arrojado en un canal en las afueras de Tokio. No reparé en mi condición hasta que recordé lo que había ocurrido. Mi primera reacción fue ver mi mano amputada, mi gran sorpresa fue ver que ahora había sido reemplazada por una mano cibernética que funcionaba como si hubiese nacido con ella, luego lo recordé! El benceno y el calor!! Dios mío! Mi cuerpo estaba cubierto con una especie de armadura, no pude sacármela. Un panel que se encontraba en mi antebrazo derecho comenzó a destellar, un texto apareció en una pequeña pantalla. “Armadura de soporte vital funcionando” ¿Qué demonios había ocurrido con Rintaro y sus hombres? ¿Cómo sobreviví? ¿Quién instaló esta armadura en mi cuerpo y por qué? Tantas preguntas y solo un nombre se venia a mi mente “Rintaro Asegawa”.
Shade 1era Parte
Viernes 06 de Abril 2050.
01: 05 a.m.Aurora online
Es de noche en Nueva Regina, las luces tiempo ya comenzaron a prenderse y esa brisa de Abril tan típica comenzó a sentirse con fuerza. Sobre el helipuerto del clausurado Unicorn Plaza Hotel, una silueta observa esta ciudad y trata de armar un rompecabezas que hace seis meses se puso en frente de su vida. La luna se reflejaba en sus ojos y a la vez en su armadura, su mente no se encontraba ahí, sino en ese punto donde todo esto había comenzado.
-“Aún recuerdo como llegué al 25avo piso de la torre Toyotomi Corp. Mis habilidades de infiltración me fueron útiles, al igual como lo fueron al facilitar el merging con esa empresa de semi-conductores el mes pasado. Frank necesitaba esa empresa de semi-conductores fuera de circulación, así que me envió a negociar con ellos. Luego de largas y engorrosas deliberaciones, la empresa malaya decidió negarse al merging con empresas G.E.D. por lo cual a la noche siguiente decidí comenzar negociaciones agresivas con la empresa en cuestión. Unos cables por aquí, unos cables por allá, un poco de C4 colocado en los lugares correctos y luego solo se podía ver cómo los escombros y el polvo volaban por los aires!! La empresa de semi conductores ya no era más que un terreno baldío.
Así fue como regresé a Nueva Regina justo para la gala de beneficencia en el Unicorn Plaza. “La imagen lo es todo Derek, salgamos y demos el show que esta gente espera de nosotros”, fueron las palabras de Frank Mortgarth mientras se colocaba su smoking en frente de un amplio espejo en su habitación. El viejo era sagaz, muy hábil con las palabras, hacía escuchar a la gente lo que ellos querían oír y siempre lo lograba. Tenía a medio Nueva Regina a sus pies, mientras que la otra mitad le temía u odiaba. Sus conexiones dentro de la ciudad eran tan grandes y fuertes que nadie se negaba a sus peticiones ni siquiera el clero.
“Míralos Derek, creen que en realidad estoy aquí por esos pequeños bastardos y su bienestar, ja! Si tan solo supieran lo que en realidad pasa tras las puertas de G.E.D.Health. Maldita sea, ahí viene ese arribista de Raimundo Velásquez, siempre tratando de caerme en gracia, lo detesto. Además, viene con la alocada de su hija, Esther, Elisa…eer ¿cual es su nombre?”
-“Su nombre es Esmeralda, Frank, Esmeralda”, la vi acercarse junto a su padre buscando el saludo del viejo. Pobres Velásquez, siempre tratando de encajar en un grupo social que los rechazaba. Ella es hermosa, su sonrisa es cristalina, su cabello largo parece agua en movimiento, no sé qué me pasa, pero cada vez que la veo pierdo concentración, pierdo balance.
-“Señor Mortgarth, Señor Ashton! Es siempre un placer verlos participar en la gala anual para ayudar a los niños más necesitados” –“Señor Velásquez, es siempre un honor trabajar para una obra tan noble como esta”, dijo Mortgarth mientras estrechaba manos con Velásquez. –“Hola Derek, ¿cómo estás? fueron sus dulces palabras –“Bien, gracias señorita Velásquez” –“no seas tan acartonado Derek”, sonrió tomándome de las manos y sacándome a bailar.
-“Te he extrañado, tonto. ¿Por qué no me llamaste? ¿Tan apretada era tu agenda como para no llamarme?-“lo siento Esmeralda, pero cuando el trabajo me consume, siento que todo lo demás desaparece.” Esos ojos, no hay nada que pueda hacer ante esos ojos –“¿te olvidas de todo? ¿Incluso de mí? Eres malo Derek Ashton, muy malo… yo acá sola, acordándome de tí y tú tal vez qué cosas estuviste haciendo en el extranjero.
Esmeralda, yo…, -“shhhhhh…no digas nada, lo importante es que ahora estamos juntos otra vez, solo abrázame fuerte y bailemos hasta que muera la noche”.
Siempre envidie esa alegría que emanaba de su ser, tan llena de vida y esperanzas, tan diferente a mi.
“¿Sabes, Esmeralda? Esta próxima semana acompañaré al señor Mortgarth a Japón, así que no podremos vernos por un tiempo”.
Y así fue, después de esa noche, nunca mas volvería a verla…
01: 05 a.m.Aurora online
Es de noche en Nueva Regina, las luces tiempo ya comenzaron a prenderse y esa brisa de Abril tan típica comenzó a sentirse con fuerza. Sobre el helipuerto del clausurado Unicorn Plaza Hotel, una silueta observa esta ciudad y trata de armar un rompecabezas que hace seis meses se puso en frente de su vida. La luna se reflejaba en sus ojos y a la vez en su armadura, su mente no se encontraba ahí, sino en ese punto donde todo esto había comenzado.
-“Aún recuerdo como llegué al 25avo piso de la torre Toyotomi Corp. Mis habilidades de infiltración me fueron útiles, al igual como lo fueron al facilitar el merging con esa empresa de semi-conductores el mes pasado. Frank necesitaba esa empresa de semi-conductores fuera de circulación, así que me envió a negociar con ellos. Luego de largas y engorrosas deliberaciones, la empresa malaya decidió negarse al merging con empresas G.E.D. por lo cual a la noche siguiente decidí comenzar negociaciones agresivas con la empresa en cuestión. Unos cables por aquí, unos cables por allá, un poco de C4 colocado en los lugares correctos y luego solo se podía ver cómo los escombros y el polvo volaban por los aires!! La empresa de semi conductores ya no era más que un terreno baldío.
Así fue como regresé a Nueva Regina justo para la gala de beneficencia en el Unicorn Plaza. “La imagen lo es todo Derek, salgamos y demos el show que esta gente espera de nosotros”, fueron las palabras de Frank Mortgarth mientras se colocaba su smoking en frente de un amplio espejo en su habitación. El viejo era sagaz, muy hábil con las palabras, hacía escuchar a la gente lo que ellos querían oír y siempre lo lograba. Tenía a medio Nueva Regina a sus pies, mientras que la otra mitad le temía u odiaba. Sus conexiones dentro de la ciudad eran tan grandes y fuertes que nadie se negaba a sus peticiones ni siquiera el clero.
“Míralos Derek, creen que en realidad estoy aquí por esos pequeños bastardos y su bienestar, ja! Si tan solo supieran lo que en realidad pasa tras las puertas de G.E.D.Health. Maldita sea, ahí viene ese arribista de Raimundo Velásquez, siempre tratando de caerme en gracia, lo detesto. Además, viene con la alocada de su hija, Esther, Elisa…eer ¿cual es su nombre?”
-“Su nombre es Esmeralda, Frank, Esmeralda”, la vi acercarse junto a su padre buscando el saludo del viejo. Pobres Velásquez, siempre tratando de encajar en un grupo social que los rechazaba. Ella es hermosa, su sonrisa es cristalina, su cabello largo parece agua en movimiento, no sé qué me pasa, pero cada vez que la veo pierdo concentración, pierdo balance.
-“Señor Mortgarth, Señor Ashton! Es siempre un placer verlos participar en la gala anual para ayudar a los niños más necesitados” –“Señor Velásquez, es siempre un honor trabajar para una obra tan noble como esta”, dijo Mortgarth mientras estrechaba manos con Velásquez. –“Hola Derek, ¿cómo estás? fueron sus dulces palabras –“Bien, gracias señorita Velásquez” –“no seas tan acartonado Derek”, sonrió tomándome de las manos y sacándome a bailar.
-“Te he extrañado, tonto. ¿Por qué no me llamaste? ¿Tan apretada era tu agenda como para no llamarme?-“lo siento Esmeralda, pero cuando el trabajo me consume, siento que todo lo demás desaparece.” Esos ojos, no hay nada que pueda hacer ante esos ojos –“¿te olvidas de todo? ¿Incluso de mí? Eres malo Derek Ashton, muy malo… yo acá sola, acordándome de tí y tú tal vez qué cosas estuviste haciendo en el extranjero.
Esmeralda, yo…, -“shhhhhh…no digas nada, lo importante es que ahora estamos juntos otra vez, solo abrázame fuerte y bailemos hasta que muera la noche”.
Siempre envidie esa alegría que emanaba de su ser, tan llena de vida y esperanzas, tan diferente a mi.
“¿Sabes, Esmeralda? Esta próxima semana acompañaré al señor Mortgarth a Japón, así que no podremos vernos por un tiempo”.
Y así fue, después de esa noche, nunca mas volvería a verla…
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